Encontrase para demostrar que es posible
Un grupo de trabajadores organizó un encuentro de empresas autogestionadas entre el 30 de abril y el 1 de mayo en Chamical. El objetivo: intercambiar experiencias y discutir sobre la construcción y fortalecimiento de este tipo emprendimientos.
Texto: Romina Gómez
Enviada Especial. Data Rioja.
Todo comenzó alrededor de las 10.30 del 30 de abril en la planta de producción de calzado deportivo Gatilar, ubicada en la ciudad de Chamical, en los Llanos riojanos.
Anteriormente la planta pertenecía al empresario Eduardo Bachelian quien la llevó a la quiebra. Hoy son sus trabajadores organizados en una cooperativa quienes luchan para que esta fuente de trabajo no se pierda.
Mario Masías, socio de la Cooperativa Chamical Limitada, llevó a Data Rioja a recorrer la planta, mientras desarrollaba su historia. “Esta fábrica se inaugura en 1983 con la ley 021 de Promoción Industrial, bajo la firma Grafa de confección de ropa blanca. Cuando se termina la promoción, la fábrica se cierra, dejando a 200 empleados en la calle. Comienzan las protestas, las marchas, los cortes de ruta, y logramos que Eduardo Menem convoque a Eduardo Bachelian, quien tenía la firma de calzados Adida. Así se comienza con la confección de este producto”.
La firma Gatilar funcionaba con 430 trabajadores, siempre hubo problemas con la patronal respecto del pago de sueldos y el trato hacia sus empleados. Por esta situación la fábrica se cerró nuevamente, previa donación de millonarios subsidios que quedaron en los bolsillos de los empresarios, dejando a los obreros nuevamente en la calle, todos ellos con más de dos años de salarios atrasados.
Luego de luchar con abogados, jueces, y el gobierno municipal y provincial, logran ingresar al predio de la fábrica donde permanecen hasta hoy. Actualmente, la cooperativa cuenta con 102 socios, pero para comenzar con una mínima producción de 1500 pares diarios necesitan de 150 a 170 obreros. Por otro lado necesitan una garantía económica, para que la empresa Edelar realice la bajada de luz a la planta.
El encuentro
En este ámbito de lucha, por una fuente de trabajo, distintas organizaciones sociales y políticas se encontraron.La dinámica del evento comenzó con talleres de reflexión a cerca del trabajo. Posteriormente se hizo una puesta en común de las conclusiones y se formó una mesa de exposición donde cada organización compartió sus experiencias.
Allí participaron, socios de la cooperativa, miembros de la Asociación de pequeños Campesinos del Noroeste Cordobés (APENOC), la Biblioteca Popular Darío Santillán, trabajadores de la empresa de autogestión Selius, un grupo de ex presos políticos de la dictadura militar y un periodista y técnico en administración de cooperativas.
Cuando la oscuridad de la noche se hizo sentir, todos los participantes del encuentro se reunieron alrededor de una pantalla gigante donde se proyectó una película sobre la experiencia de los obreros de la fábrica de cerámica Zanon. Ese fue sin duda el momento más emotivo del encuentro ya que muchos de los trabajadores presentes se sintieron identificados con un proyecto donde los trabajadores son dueños de los medios de producción.Lugo de la película, los trabajadores compartieron empanadas, música y baile, alrededor de un fogón.
1 de mayo
Otro de los motivos del encuentro fue revindicar el 1 de mayo como día de lucha. Por ello se realizó una movilización hacia la plaza de la ciudad. Entre los oradores se destacaron las palabras de Lucas Moyano, secretario general de la cooperativa. “El trabajo autogestionado es el que estamos queriendo recuperar, y hoy dimos un paso adelante en la unión del sector obrero, que estamos seguros que es lo único que va a salvar al pueblo argentino. Por eso estamos acá para revindicar estas luchas”.
Por otro lado, Ramiro Gaggiotti, miembro de la Biblioteca Popular Darío Santillán, expresó que “vivimos golpeados por violencias de distintos tipos, nos tienen divididos, desocupados. Los obreros de la cooperativa pelean por fuentes de trabajo, que es un sinónimo de vida digna, de futuro para los jóvenes, para que nuevamente seamos fuertes frente al sistema que nos oprime”.
Los ex presos políticos también se expresaron respecto a lo vivido en la jornada. Por eso Miguel Godoy expreso que “tenemos que tener presente que esta fábrica es un futuro para nuestros hijos, es una de las respuestas que los jóvenes esperan, por eso esta lucha la tenemos que ganar”.
Por último Fernando Gómez, trabajador de Selius, una de las empresas organizadoras planteó que “esto es una herramienta genuina de laburo para muchos jóvenes que hoy se suicidan por que no ven una salida. Tenemos que empezar a apoyar estos emprendimientos que están surgiendo, por que las fábricas deben estar al servicio del pueblo”.
Al finalizar la marcha se leyó un documento único elaborado entre los organizadores y regresaron nuevamente a la fábrica marchando. Allí se compartió un locro popular y se intercambiaron teléfonos y mails para que todas las organizaciones y movimientos permanezcan en contacto
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